VANCOUVER, Canadá (Fundación Thomson Reuters) - Los países que celebran elecciones deben dar prioridad a tener un número equitativo de mujeres y hombres en posiciones de alto rango, dijo la jefa de ONU Mujeres, al tiempo que reveló un ambicioso impulso para duplicar el número de gabinetes con igualdad de género en el próximo año.
Phumzile Mlambo-Ngcuka, ex vicepresidenta de Sudáfrica, dijo que los gabinetes equilibrados tomaron mejores decisiones no sólo para las mujeres, sino también para la sociedad y las economías en general, y proporcionaron modelos a seguir para la próxima generación de niñas y niños.
Actualmente, sólo 11 países tienen gabinetes con igualdad de género, pero Mlambo-Ngcuka dijo que esperaba ver 25 para septiembre del 2020, y creía que los países africanos podrían liderar el proceso.
“Queremos que nuestras niñas crezcan aspirando a ser líderes, a liderar sus países, empresas e instituciones”, dijo a la Fundación Thomson Reuters, en el marco de Women Deliver, la conferencia sobre igualdad de género más grande del mundo.
“Cuando las chicas ven a alguien que se parece a ellas, es cuando se dan cuenta: ‘Yo también puedo hacer esto’”, apuntó.
Crear gabinetes con 50 por ciento hombres, 50 por ciento mujeres también ayudaría a los niños a comprender “que la diversidad es (una) forma de vida más normal que la exclusión”.
Canadá fue el primer país en introducir un gabinete de igualdad de género en 2015. Otros incluyen Etiopía, Seychelles, Sudáfrica y Ruanda.
Mlambo-Ngcuka dijo que estaba “conversando” con varios países, pero se negó a decir cuál pensaba que sería el siguiente.
Dijo que era importante romper el mito de que los hombres tenían más experiencia porque eran hombres. Apuntó que las mujeres ministras traían nuevas perspectivas y, a menudo, tomaban decisiones diferentes a los hombres.
Por ejemplo, dijo que lo primero en lo que se centró cuando se convirtió en ministra de Energía en Sudáfrica en 1999 fue aumentar la electrificación rural para reducir la carga de las mujeres obligadas a pasar grandes cantidades de tiempo recolectando leña.
Sugirió que si una mujer era responsable de la infraestructura, podría centrarse en mejorar el agua y el saneamiento, factor clave para mantener a las niñas en la escuela, mientras que un hombre podría enfocarse más en desarrollar aeropuertos.
Muchas niñas en los países en desarrollo abandonan la educación en la pubertad porque sus escuelas no tienen baños.
Una ministra de Educación también sería más propensa a abordar temas como la violencia sexual en los campus que un hombre, indicó la funcionaria.
“Seguramente, un grupo homogéneo de hombres que intentan hablar sobre lo que va a hacer con la educación de las niñas no es el grupo de personas más inspirado e informado, y la educación de las niñas es un gran problema en la mayoría de los países en desarrollo”, dijo. Reuters
Phumzile Mlambo-Ngcuka, jefa de ONU Mujeres, en conferencia Women Deliver, Vancouver, 5 junio 2019. Thomson Reuters Foundation/Emma Batha