Davos (Suiza), 23 ene (EFE).- Las mujeres, apoyadas por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, alzaron hoy su voz en contra del acoso sexual, la violencia de género y la discriminación laboral, en un lugar, el Foro Económico Mundial, que aún está muy dominado por los hombres.
El Foro de Davos, que se inauguró hoy oficialmente, acoge a más de 3.000 líderes de la cultura, la sociedad civil, la política y la economía, entre ellos 70 jefes de Estado y de Gobierno, pero las mujeres apenas alcanzan una representatividad del 21%.
La organización ha querido no obstante dar "una importante señal" a favor del poder de las mujeres, al elegir como copresidentas de la cuadragésima octava edición del Foro a siete mujeres, desde mandatarias y responsables de organizaciones económicas, sindicales y científicas a ejecutivas de empresas y presidentas de fundaciones.
En un momento en el que el movimiento femenino impulsado desde Hollywood #MeToo (Yo también) ha dado visibilidad a nivel internacional al acoso sexual en la esfera cultural, económica y política, el Foro de Davos colocó esta problemática en la agenda de su encuentro anual.
La directora ejecutiva de Oxfam Internacional, Winnie Byanyima, dijo hoy en un debate que para luchar contra el acoso sexual que hay que eliminar las leyes que discriminan a la mujer en la economía, ya que aún hay 155 países que las tienen.
"Tenemos que hacer frente a la desigualdad económica para poner fin a la violencia sexual", recalcó.
La vicepresidenta ejecutiva y máxima responsable de desarrollo de negocio en Microsoft, Peggy Johnson, explicó cómo la multinacional ha eliminado la "mediación forzosa" interna en casos de denuncias de acoso social y apoyado la elaboración de una legislación para acabar con este tipo de prácticas.
En EEUU hay unos 60 millones de estadounidenses con cláusulas contractuales sobre la mediación privada, señaló.
"Algo está cambiando lentamente" en la sociedad, sostuvo, y emocionada recalcó que muchas mujeres jóvenes, como su hija, ya no toleran ninguna actitud machistas o abusiva de los hombres.
La presidenta y consejera delegada de Advertising Council, Lisa Sherman, que ha lanzado la campaña #ThatsHarassment (Esto es acoso) a través de seis cortos sobre casos de abuso sexual en el lugar de trabajo, describió cómo no se atrevió a confesar que era homosexual por miedo a que pudiera "perjudicar su carrera".
Las copresidentas del Foro, entre ellas la primera ministra de Noruega, Erna Solberg, y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, abogaron a su vez por empoderar a las mujeres y luchar por la igualdad de género mediante la educación e instrumentos de financiación.
"Denegar derechos iguales a las mujeres no es un plan válido para el futuro y no tiene sentido ni política ni económicamente", subrayó Solberg, mientras que Lagarde dijo que las copresidentas quieren demostrar que "incluso sin testosterona" pueden "generar una energía constructiva y positiva para impulsar soluciones" en Davos.
Las mujeres que pusieron hoy voz a la discriminación de género recibieron el respaldo del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, quien calificó el acoso sexual de "problema sistémico".
Los movimientos #MeToo, "Time is up" (Se acabó) y las Marchas de las Mujeres en EEUU y otras partes del mundo "nos dicen que necesitamos un debate crítico sobre los derechos de las mujeres, la igualdad y las dinámicas de poder en torno al género", afirmó.
"El tiempo realmente se acabó", dijo Trudeau, quien cuenta con un gabinete con igual número de hombres que mujeres, indicó que "cada uno de los líderes" políticos y empresariales puede "actuar inmediatamente" y "contratar, promover y retener a más mujeres".
No porque hacerlo sea lo justo o lo correcto, sino porque es lo más inteligente, recalcó Trudeau en un aplaudido discurso.
Puso de ejemplo un estudio de la consultora McKinsey que asegura que cerrar la brecha de género en Canadá aportaría 150.000 millones de dólares a la economía canadiense en 2026, y otro del Instituto Peterson para la Economía Internacional que estima que las empresas que aumentan la cuota de mujeres en posiciones de liderazgo del 0 % al 30 % mejoran sus beneficios en un 15 %. Davos